Con una sensibilización frente a cómo afrontar los problemas sin hacer uso del
alcohol o las sustancias psicoactivas, en una nueva emisión de Edu.Digital Salud hablamos acerca del porqué nuestro actuar diario y comportamiento cotidiano tiende a ser automático y poco reflexivo frente a las conductas y elecciones que pueden estar afectando nuestra salud, con acciones nada sanas que solo buscan la satisfacción inmediata.
A través de campañas de prevención con los servidores públicos, frente al abuso del alcohol y sustancias, la Aerocivil propende por la preparación, disposición y acción anticipada destinada a evitar la aparición de un fenómeno indeseable o reducir al máximo sus consecuencias cuando esté presente y, desde el Grupo de Seguridad y Salud en el Trabajo, la profesional en psicología Martha Cecilia Sánchez Rueda, compartió en este espacio algunos tips para prevenir de manera anticipada algunas conductas indeseables que puedan llegar a convertirse en comportamientos tóxicos, o por lo menos, reducir al máximo sus consecuencias en caso de presentarse.
Según la experta, el cerebro humano está preparado para sobrevivir a cualquier situación y es parte vital aceptar que se puede cambiar de actitud de forma voluntaria
“En tiempos de cambio quienes estén abiertos al aprendizaje se adueñarán del futuro, mientras aquellos que creen saberlo todo estarán bien equipados para un mundo que ya no existe” Eric Hoffer
Dentro de los tips que se desarrollaron durante la charla para el proceso de aprender a cambiar, podemos resaltar:
- El cerebro no reconoce realidad o fantasía
- Se deben reconocer tus creencias, así que lo primero es creer que lo puedes hacer: trabajo, disciplina, compromiso, tiempo.
- Para la neurociencia cambiar es sinónimo de aprender. Los adultos queremos dominar, no aprender de nuevo. Y antes de cambiar, tienes que conocerte a ti mismo para saber si quieres mover algo de tu vida.
Pero, ¿por qué cuesta tanto cambiar?, porque uno cree que no puede, porque en el proceso de cambio hay dolor y no nos gusta el dolor. La gente tiene que entender que el cambio es un proceso, es un camino que puede ser de un día, un año, o toda la vida.
Sin embargo, una vez que sabemos que queremos cambiar, científicamente sabemos que el cerebro funciona diferente bajo el ‘deseo’ y el ‘querer’ que bajo el ‘deber’.
Cuando el cambio es realmente deseado por uno mismo, el cerebro funciona mucho mejor porque nuestro sistema cognitivo se mueve más por la emoción que por la obligación, por lo cual es importante reconocer que el cerebro no tiene la capacidad de distinguir entre realidad o fantasía, es creer en nosotros mismos, en el cambio que necesitamos y que podemos mejorar lo que queremos en la vida.
En resumen:
- Identifica los factores desencadenantes.
- Interrumpe esos procesos automáticos.
- Reemplaza el hábito por otro.
- No compliques las cosas.
Y por sobre todo, estar abierto y dispuesto al cambio nos ayudará a generar mejores hábitos de vida de forma saludable, con comportamientos positivos que nos ayuden a tener una mejor visión de la cotidianidad y afrontar los retos que nos impone el día a día.
Vea la charla completa en nuestro canal de YouTube CEANoticia
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